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Alemania ha seguido en la senda de la recuperación en 2009, salvando el dato del último trimestre, después de que la producción aumentara un 0,4% en el primer trimestre y un 0,7% en el segundo trimestre de 2009. La mayoría de los economistas se muestran moderadamente optimistas de cara a 2010, anticipando para este año un crecimiento de entre el 1,2% y el 2%, un indicio de que la recuperación se acelerará, aunque no lo suficiente como para compensar la caída en picado registrada a finales de 2008 y principios de 2009.

Estas perspectivas moderadamente positivas también se ven reflejadas en una mayor confianza de las empresas. En términos sectoriales, los proveedores de energía, la industria farmacéutica y el sector de la alimentación califican su situación como positiva, mientras que el metal, la ingeniería y la automoción consideran que su situación es sombría. De cara al futuro, el sector químico augura unas perspectivas muy positivas, mientras que en las empresas de ingeniería e imprentas prevalece el pesimismo.

No obstante, de enero a septiembre de 2009, el número de insolvencias de empresas aumentó un 11,2% interanual, hasta las 24.717, lo que supone una mejora respecto al aumento del 15,3% registrado entre enero y julio. A pesar del mayor impulso de la recuperación económica de Alemania, todavía prevemos que las insolvencias correspondientes a 2009 aumenten un 10%, afectando a 32.200 empresas. Según las previsiones, esta tendencia se mantendrá en 2010 llegándose a las 35.500 insolvencias, mientras que el valor de las cuentas pendientes por cobrar se reducirá considerablemente en relación con 2009. Los sectores más afectados son el automóvil, metal/acero e ingeniería. El año pasado, 90 empresas se declararon en quiebra sólo en el subsector de los proveedores de automoción, un aumento del 330% en relación con 2008. La industria de transformación del metal registró un aumento del 140% y la ingeniería del 100% en el mismo período. Los sectores de la construcción, la electrónica y minorista se han visto menos gravemente afectados.

En noviembre de 2009, el indicador de Frecuencia Prevista de Impagos [FPI] en Alemania cayó en relación con el mes anterior, llegando a su nivel más bajo en 2009. A pesar de registrar una caída generalizada, los niveles actuales de EDF en Alemania todavía están casi dos veces por encima de los registrados en el verano de 2008, lo que apunta a un riesgo todavía elevado de impagos entre las empresas del panel. 

¿Obstaculizarán las condiciones de préstamo más estrictas el retorno a un crecimiento sólido?

Aunque muchos de los indicadores macroeconómicos en Alemania siguen siendo positivos, existe el riesgo de que la restricción en los préstamos bancarios obstaculice el crecimiento empresarial y económico. Hacia finales de 2009, han aumentado las quejas de las empresas respecto a las dificultades para acceder al crédito. En diciembre de 2009, el 44,3% de las empresas afirmaba que los préstamos bancarios se habían restringido, un aumento del 1,4% respecto al mes anterior, siendo el sector de la construcción el que más preocupado se mostraba [50%].

Para contrarrestar una potencial contracción del crédito en 2010, el Gobierno alemán convocó una cumbre de alto nivel de representantes de bancos y empresas a principios de diciembre. El resultado de esta cumbre fue el compromiso de los bancos de facilitar más créditos, especialmente a las pequeñas y medianas empresas, y el nombramiento de un mediador de crédito para impulsar el diálogo entre los bancos y las pymes alemanas que tienen un acceso insuficiente al crédito. Además, se decidió que tanto las entidades bancarias como el banco estatal KfW reactivarían conjuntamente el derrumbado mercado de las titulaciones. Consideramos esta última medida como un paso muy importante para reactivar el mercado de la refinanciación para los bancos y que amplíen su alcance en la concesión de créditos a empresas.

A pesar de las iniciativas impulsadas desde estamentos políticos para evitar una contracción del crédito, el principal problema será como responden los bancos ante el deterioro de las calificaciones de muchos prestatarios, una vez se hagan públicas sus cuentas anuales 2009. Si las decisiones en material de concesión de créditos se basan exclusivamente en las cuentas de 2009, sin tener en cuenta las mejores perspectivas de negocio y una cuentas provisionales para 2010 probablemente mejores, puede producirse una contracción del crédito. El reto al que se enfrentarán los bancos será analizar los balances de las empresas con visión de futuro, prestando especial atención a las expectativas de negocio de los prestadores y las perspectivas en 2010.  

Sector de la construcción y sector textil

La crisis económica que se inició en otoño de 2008 empezó a afectar al sector de la construcción en Alemania, seis meses después. Entre enero y septiembre de 2009, los nuevos pedidos se redujeron un 7,5% y el volumen de negocio cayó un 6,8% interanual. El comportamiento de pago de las empresas de la construcción no ha empeorado en relación con otros sectores, aunque la morosidad es más frecuente en el caso de las empresas de construcción que trabajan para el sector público, que tiene, a su vez, períodos de pago largos. Crédito y Caución prevé que se mantenga el actual comportamiento del sector de la construcción en 2010, sostenido, principalmente, por un gasto público continuado. Se prevé que la disminución del volumen de negocio, hasta -1,5%, será inferior que en 2009. La construcción de viviendas se recuperaría ligeramente, mientras que las obras públicas aumentarían un 8%, ya que muchos proyectos de infraestructura y obras públicas, contemplados en el paquete de estimulo aprobado en 2009, se iniciarán en 2010. La construcción comercial sólo repuntará cuando se produzca una recuperación sostenible y duradera de la economía. Se prevé que el volumen de negocio siga reduciéndose en un 10% en 2010.   

En el sector textil y de la confección, el número de empleados se redujo un 10,4% entre octubre de 2008 y octubre de 2009, y esta tendencia se mantendrá a medio plazo. El volumen de negocio se ha reducido un 16,8%, afectando en mayor media a los pre-productores (-20,6%), mientras que el subsector de prendas de vestir ha acusado un golpe menor (-12%). Con la caída de las exportaciones y menos pedidos de los minoristas alemanes, la producción y los pedidos también cayeron por encima del 10%. Es probable que el consumo privado se deteriore en 2010, debido a la subida de precios de las materias primas, al desempleo y a un mayor índice de ahorro, lo que podría afectar negativamente al conjunto del sector textil, en términos de menos clientes, facturación reducida y mayor presión sobre los precios.